La ptosis palpebral o caída del párpado, es un descenso del párpado superior que afecta uno o ambos párpados. Puede aparecer tanto en niños como en adultos comprometiendo de forma variable la visión y estética de los pacientes. Otros síntomas asociados a esta enfermedad son: dolores de cabeza, tortícolis y cansancio visual.

Puede presentarse en personas de cualquier edad, siendo más frecuente en mayores de 50 años, debido al debilitamiento del músculo que eleva el párpado. Existen otras causas menos frecuentes que también pueden ocasionar la caída del párpado como el uso de lentes de contacto, alergias oculares, traumatismos, enfermedades musculares y neurológicas.

En los niños que nacen con ptosis palpebral puede haber un desarrollo anormal de la visión que se conoce como ambliopía, por lo que es importante realizar la corrección del párpado a tiempo.

En la gran mayoría de los pacientes, el tratamiento consiste en realizar una cirugía para la corrección de ptosis palpebral. La técnica quirúrgica varía según cada paciente y la causa de la caída del párpado. Por lo que es imprescindible hacer una valoración detallada de cada caso con el fin de determinar la mejor opción de tratamiento. Estos procedimientos se realizan a través de incisiones poco visibles y pueden ser combinados con otras cirugías cosméticas como la blefaroplastia, elevación de la ceja, cantopexia, entre otros. Generalmente con este procedimiento se logran buenos resultados estéticos para el paciente, los cuales van a depender de factores individuales de cada persona como su anatomía, cicatrización, cuidados posteriores a la cirugía, entre otros.

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