El Ojo Seco es una enfermedad en la cual existe una inadecuada lubricación de la superficie ocular, bien sea por una disminución en la producción de lágrimas o una alteración su calidad.
Esta condición representa uno de los motivos de consulta más frecuentes en las clínicas oftalmológicas debido a la exposición prolongada de pantallas (celulares, computadores, televisores, tabletas) que existe en la actualidad.

Los síntomas más frecuentes por los que consultan los pacientes y que generalmente afectan ambos ojos son:

  – Sensación de ardor, picazón o quemazón en los ojos
– Enrojecimiento ocular
– Sensación de tener algo dentro de los ojos
– Visión borrosa
– Fatiga o cansancio ocular
– Sensibilidad con la luz
– Lagrimeo
– Dolor ocular

Dentro de las causas más frecuentes de ojo seco podemos encontrar la edad, algunas enfermedades (artritis reumatoidea, enfermedades tiroideas, lupus, síndrome de Sjögren), algunos medicamentos, cirugía refractiva con láser, enfermedades de la glándula lagrimal, alteraciones en párpados, enfermedades de la piel, factores ambientales o laborales.
Cuando los síntomas persisten se debe asistir a una valoración con un especialista en oftalmología con el fin de realizar los estudios necesarios para establecer la causa y el grado de afectación de la superficie ocular.

De esta manera se puede realizar el tratamiento más adecuado para cada paciente que puede incluir:

– Diferentes tipos de medicación en gotas como lubricantes de última generación, antiinflamatorios, inmunosupresores y gotas que se hacen de la sangre del propio paciente
– Medicación que estimula la producción de lagrimas
– Medicina alternativa
– Implante de tapones en puntos lagrimales o cirugía
– Terapias y cirugías para las enfermedades en párpados
– Finalmente, la prevención y cambios en el estilo de vida son claves en el tratamiento de pacientes que sufren de esta enfermedad.

En nuestra consulta hacemos una evaluación completa de cada caso en particular, para direccionar el tratamiento más adecuado, dependiendo del tipo de enfermedad que posea el paciente y así obtener mejores resultados, con mejoría de los síntomas.